Hola, bendiciones, en esta oportunidad queremos presentarte una serie y colección de versículos que de seguro te bendecirán, en esta incluye invitaciones de distintos tipos, y que te pueden ayudar a la hora que quieras extender una.
Versículos Bíblicos sobre las Invitaciones
Números 10:29-32
Entonces Moisés dijo a Hobab, hijo de Reuel madianita, suegro de Moisés: Nosotros partimos hacia el lugar del cual el Señor dijo: Yo os lo daré. Ven con nosotros y te haremos bien, pues el Señor ha prometido el bien a Israel. Pero él le dijo: No iré, sino que me iré a mi tierra y a mi parentela. Después dijo Moisés: Te ruego que no nos dejes, puesto que tú sabes dónde debemos acampar en el desierto, y serás como ojos para nosotros.
1 Samuel 9:22-24
Entonces Samuel tomó a Saúl y a su criado, los llevó a la sala y les dio un lugar a la cabecera de los invitados que eran unos treinta hombres. Y dijo Samuel al cocinero: Trae la porción que te di, de la cual te dije: Ponla aparte. Entonces el cocinero alzó el pernil con lo que estaba en él y lo colocó delante de Saúl. Y Samuel dijo: He aquí lo que estaba reservado. Ponlo delante de ti y come, porque ha sido guardado para ti hasta el momento señalado, ya que dije: He invitado al pueblo. Y Saúl comió con Samuel aquel día.
1 Reyes 13:7
Entonces el rey dijo al hombre de Dios: Ven conmigo a casa y refréscate, y te daré una recompensa.
Job 1:4
Sus hijos solían ir y hacer un banquete en la casa de cada uno por turno, e invitaban a sus tres hermanas para que comieran y bebieran con ellos.
Jeremías 35:2
Ve a la casa de los recabitas, habla con ellos, llévalos a la casa del Señor, a una de las cámaras, y dales a beber vino.
Lucas 7:36
Uno de los fariseos le pedía que comiera con él; y entrando en la casa del fariseo, se sentó a la mesa.
Lucas 11:37
Cuando terminó de hablar, un fariseo le rogó que comiera con él; y Jesús entró y se sentó a la mesa.
Juan 21:12
Jesús les dijo: Venid y desayunad. Ninguno de los discípulos se atrevió a preguntarle: ¿Quién eres tú?, sabiendo que era el Señor.
Hechos 10:23
Entonces los invitó a entrar y los hospedó. Al día siguiente se levantó y fue con ellos, y algunos de los hermanos de Jope lo acompañaron.
1 Corintios 10:27
Si algún incrédulo os invita y queréis ir, comed de todo lo que se os ponga delante sin preguntar nada por motivos de conciencia.
Juan 2:2
y también Jesús fue invitado, con sus discípulos, a la boda.
Hechos 16:9
Por la noche se le mostró a Pablo una visión: un hombre de Macedonia estaba de pie, suplicándole y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos.
Jueces 1:3
Entonces Judá dijo a su hermano Simeón: Sube conmigo al territorio que me ha tocado, para que peleemos contra los cananeos; yo también iré contigo al territorio que te ha tocado. Y Simeón fue con él.
Jueces 11:6
Y dijeron a Jefté: Ven y sé nuestro jefe para que peleemos contra los hijos de Amón.
2 Reyes 16:7
Y envió Acaz mensajeros a Tiglat-pileser, rey de Asiria, diciendo: Yo soy tu siervo y tu hijo; sube y líbrame de la mano del rey de Aram y de la mano del rey de Israel que se han levantado contra mí.
Hechos 8:30-31
Cuando Felipe se acercó corriendo, le oyó leer al profeta Isaías, y le dijo: ¿Entiendes lo que lees? Y él respondió: ¿Cómo podré, a menos que alguien me guíe? E invitó a Felipe a que subiera y se sentara con él.
Salmos 34:3
Engrandeced al Señor conmigo, y exaltemos a una su nombre.
Salmos 66:5-6
Venid y ved las obras de Dios, admirable en sus hechos a favor de los hijos de los hombres. Convirtió el mar en tierra seca; cruzaron el río a pie; regocijémonos allí en El.
Números 22:6
Ven ahora, te ruego, y maldíceme a este pueblo porque es demasiado poderoso para mí; quizá pueda derrotarlos y echarlos de la tierra. Porque yo sé que a quien tú bendices es bendecido, y a quien tú maldices es maldecido.
Números 23:7
Y comenzó su profecía, y dijo: Desde Aram me ha traído Balac, rey de Moab, desde los montes del oriente: Ven, y maldíceme a Jacob; ven, y condena a Israel.
Números 25:1-2
Mientras Israel habitaba en Sitim, el pueblo comenzó a prostituirse con las hijas de Moab. Y éstas invitaron al pueblo a los sacrificios {que hacían} a sus dioses, y el pueblo comió y se postró ante sus dioses.
Proverbios 1:10-11
Hijo mío, si los pecadores te quieren seducir, no consientas. Si dicen: Ven con nosotros, pongámonos al asecho para derramar sangre, sin causa asechemos al inocente.
Esperamos que esta serie sea de mucha bendición para tu vida, recuerda que estos versículos pueden ayudarte a extender una invitación, estos textos tienen ejemplos claros sobre las invitaciones que se extendían en aquellos tiempos.